Y sí, "hacer un pausa" pide un poco de preparación : pasar un buen rato lamentablemente no es regalado... Y como joven europeo casi recién egresado (ingeniero telecoms), viviendo más o menos a crédito desde mi iniciación a la moto, y habiendo hasta ahí hecho road-trips de un fin de semana largo como mucho, la tarea parecía pasablemente complicada !
(Su servidor)
El primer paso hacía la solución se presentó a través de una oportunidad de empleo en Argentina, un contrato de duración indeterminada en contrato local - sueldo en pesos & 2 semanas de vacaciones por año - que me permitió partir vivir y tomar la temperatura en ese nuevo continente.
Trabajando en aquel momento en Thales Alenia Space (TAS) como contratista (varios empleadores en 3-4 años sobre sitio), estoy informado durante la primavera 2011 por mi responsable Eric (gracias a vos !) que un equipo de argentinos pasando a charlar negocio buscaban aparte un francés conociendo los métodos de TAS para venir reforzar sus efectivos en un proyecto de construcción de satélites. Algunas entrevistas por mail y teléfono más tarde, y luego de una ida y vuelta para encontrarse en Buenos Aires en septiembre, estoy contratado fin 2011 por la sociedad Arsat para participar de la implementación del programa nacional de desarrollo telecoms "Argentina Conectada", más precisamente por lo que me toca al seguimiento de producción de la carga útil de los dos primeros satélites en calidad de ingeniero Radio-Frecuencias.
(Los proyectos Arsat-1 & Arsat-2)
(La estación terrena de Benavídez & el sitio de Invap en Bariloche)
(La carga útil en sala limpia & el lanzador Ariane-5 del vuelo VA220 : Fly baby, fly !)
Un buen primer paso sin duda, que no solamente me habrá considerablemente acercado de la zona de interés sino también dado el tiempo de desarrollar mis flojitas bases de español más allá de las escasas palabras de turista recién llegado, una verdadera ventaja para disfrutar del viaje de forma menos superficial. Para ser exacto, tendría que hablar acá de "castellano", versión muy levemente acomodada del idioma por los sudamericanos y particularmente por los porteñ@s (habitantes de Buenos Aires). Seis meses de aclimatación bastante agotadores en este aspecto, pero la integración resultante vale la pena, aunque sea finalmente muy difícil perder toda huella de acento extranjero y realmente pasar por un local : conocer un poco de lumfardo y estar al tanto de las actualidades locales facilita mucho el contacto !
(Una guía essencial para entender l@s porteñ@s !)
Igual, a este nivel todavía me faltaba atender unas cuantas brechas serias antes de poder pretender al gran paseo…
La estación terrena (centro de control de los satélites) incluyendo las oficinas de Arsat siendo basada en Benavídez, en zona norte de Buenos Aires, y a pesar de que haya tenido la suerte de ir regularmente a San Carlos de Bariloche en el norte de la Patagonia donde la sociedad asociada Invap procedía con TAS a la fabricación y ensayos de aquellos satélites, mi esperanza de poder disfrutar de la relativa proximidad de algunas maravillosas locales fue rápidamente temperada por el cambio de referencias con respecto a las distancias y el tiempo disponible...
Para ayudar a representarse la cosa, hay que visualizar primero que la distancia entre las puntas norte y sur de Argentina (de los 23°S del trópico del Capricorne en Jujuy hasta los 55°S de Ushuaia) equivale a la distancia juntando las costas este & oeste de los Estados-Unidos, o también cubriría Europa de Marrueco a Scandinavia !
Difícil en aquellas condiciones desplazarse de otra forma que en avión, salvo de pasar la mitad de sus cortas vacaciones en el trayecto... Y es así que me fui entre navidad y año nuevo 2012 a descubrir los magníficos glaciares de El Calafate (dentro de los cuales el famoso Perito Moreno) y de los enbrujadores alrededores de Ushuaia (viaje entre los dos en avión, 600 kms en línea derecha y 870 por la ruta). Un accidente de moto en los primeros días de 2013 y los 3 meses de licencia asociados habrán luego pasablemente complicado mis pretensiones de vacaciones, y al final habré tomado solamente 3 semanas de las 7 generadas en tres años y medio de contrato... Justo lo suficiente para ir a visitar (en avión, 1.300 kms desde BsAs) las impresionantes cataratas de Iguazú en agosto 2013 y ubicar 10 días de paseo (en avión) fin 2014 con mi padre pasado a visitarme.
Unas escapaditas que por lo menos me permitieron tomar la medida de la frescura estival en Tierra del Fuego y de la suavidad del invierno en la selva del norte del país.
(El Calafate - Perito Moreno & Glaciar tour)
(Ushuaia - Canal Beagle)
(Iguazú - Lado Argentino & Garganta del Diablo)
(Iguazú - Lado Brasileiro)
(Bodegas mendocinas & mi padre en el mirador del Aconcagua)
El último verdadero obstáculo al viaje quedaba mi compromiso con algunos préstamos en Francia : una pesadilla en razón de la interdicción de comprar divisas extranjeras implementada justo en el momento de mi llegada por el gobierno argentino para intentar contener la fuga de capital y la indetenible ascensión del dólar paralelo… Les paso los detalles de las varias soluciones improvisadas, pero terminé logrando acabar con esto y finalmente constituirme en el tiempo de esta misión (2 satélites) un ahorro suficiente para mandarse a soltar amarras. :)
Bonus no-previsto al principio, esos 3 años pasados a renovar mi visa de trabajo también me dieron acceso a la residencia permanente argentina, lo cual simplifica claramente las operaciones administrativas y cruces de fronteras por los países del Mercosur.
Y es así que mi-2015, luego de haber terminado con los ensayos en tierra del Arsat-2 (pensaba inicialmente quedarme hasta el lanzamiento y los ensayos en órbita pero se demoró y estaba restringido por el tema de las lluvias), pude renunciar y empalmar con ese fabuloso viaje que en aquel momento venía preparando activamente desde cerca de dos años.
Al final, me habrá entonces llevado cuatro años para efectuar la transición del residente europeo endeudado al residente sudamericano libre de todo compromiso… Una experiencia rica en aprendizaje a inmergirme progresivamente en la cultura de este sorprendente país que es Argentina, de alguna forma siendo sí mismo una zona de transición entre la influencia occidental más presente acá y los países más andinos del resto de mi recorrido.
(Asado en la terraza del amigo Tano. Salud !)
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